Nos merecemos un Gobierno que no mienta

ETA reconoció ayer que sigue enviando cartas de extorsión. Bueno, todos los sabíamos. Las cartas de extorsión enviadas recientemente por ETA a empresarios vascos y navarros iban mataselladas con fecha posterior al inicio de la tregua. El Gobierno lo ha negado, alegando ciertos informes policiales que simplemente ignoran la fecha de las cartas. Es decir, que si una carta lleva matasellos de 5 de mayo y un Policía te dice que no es así, tú te lo tienes que creer y ya está. Puramente orwelliano, vamos.

Lo más curioso es que, este mismo domingo y después de que ETA haya confirmado que sigue extorsionando a vascos y navarros, la Vicepresidenta De la Vega va y dice que no es así, que la extorsión no se está produciendo. Esto ya no es que sea orwelliano. Lo que tenemos en este caso es que esta señora nos toma por idiotas a todos.

Alguien podría tener dudas de que el Gobierno está tratando de conseguir con esta tregua o bien mejorar sus próximos resultados electorales, o bien conseguir que no se sepan ciertas cosas que quiere tener bien escondidas. Podemos hacer muchas hipótesis. Lo que resulta muy claro a estas alturas es que el Gobierno está mintiendo para encubrir a una banda terrorista, incluso cuando esa banda confiesa públicamente sus delitos, lo cual ya es el colmo de los colmos. Tal vez vaya siendo hora de salir a la calle otra vez a manifestarse, porque si está claro que los españoles nos merecemos un Gobierno que no mienta -parafraseando a Rubalcaba-, lo que ya no puede soportar ninguna democracia -y ya por segunda vez en el caso de España, y en ambas ocasiones con el PSOE en La Moncloa- es un Gobierno que se dedica a encubrir a una banda terrorista.